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La reconstrucci贸n o dramatizaci贸n de los hechos en un programa informativo o documental puede constituir una valiosa herramienta para ayudar a explicar lo sucedido. Sin embargo, nunca se debe recurrir al sensacionalismo o a la dramatizaci贸n excesiva, ni mucho menos a la invenci贸n de datos o acontecimientos. La clave est谩 en identificar clara y reiteradamente todo segmento reconstruido, de forma que no se genere confusi贸n en el p煤blico. Como regla general, la 成人快手 recomienda no recurrir a la reconstrucci贸n o dramatizaci贸n de acontecimientos en los noticieros. El riesgo de confundir al p煤blico es demasiado grande y puede afectar nuestra credibilidad. No obstante, las dramatizaciones producidas por otros, como el caso de las reconstrucciones de cr铆menes hechas por la polic铆a pueden utilizarse normalmente, con las debidas advertencias. La reconstrucci贸n de hechos 鈥 Luis Del Valle, Secci贸n Latinoamericana de la 成人快手 En un mundo tan acostumbrado a las im谩genes violentas que nos llegan desde distintos frentes, no resulta dif铆cil ver con qu茅 frecuencia los noticieros se ven tambi茅n contagiados por esta "necesidad " de mostrar el drama, el sufrimiento y hasta la sangre para atrapar a la audiencia. Pero no estamos aqu铆 para hablar del debate en torno a la violencia en la televisi贸n u otros medios de comunicaci贸n, sino para explicar la responsabilidad que asume la 成人快手 cuando se trata de recrear casos cuyas im谩genes o sonidos no existen y entonces requieren ser producidos o "creados". Nada puede ser m谩s confuso que estar atendiendo al desarrollo de alguna noticia 鈥 ya sea en la radio o televisi贸n - y pensar que lo que estamos viendo o escuchando es lo que ha ocurrido cuando en realidad no se trata m谩s que de una reconstrucci贸n. La claridad Es muy com煤n ver en la televisi贸n casos, sobretodo policiales, en los que se nos muestra la reconstrucci贸n del evento, ya sea un asesinato o un asalto violento, tal y como supuestamente ocurri贸. Si al pie de la imagen no se nos deja claramente establecido que lo que estamos viendo es una reconstrucci贸n, no habr谩 forma de distinguir entre la realidad y la ficci贸n, a no ser que las actuaciones sean francamente malas. Sin embargo, 驴cu谩ntas veces una reconstrucci贸n ha sido realizada de tal forma que parece una pel铆cula de ficci贸n, con primeros planos de la v铆ctima o c谩maras lentas que no hacen m谩s que dramatizar lo que estamos viendo sin ning煤n prop贸sito explicativo? El riesgo de haber visto tantas pel铆culas de ficci贸n en nuestras vidas parece apoderarse aqu铆 de los editores de noticias que aparecen como los nuevos Alfred Hitchcok del suspenso, confundiendo su labor de comunicador con la de cineasta. Ya me ha pasado antes: estar frente a la televisi贸n y no poder creer que lo que est茅 viendo no sea realidad. No lo es, claro est谩 pero me lo han hecho creer y por tanto me han confundido. Una simple nota a pie de la imagen y a lo largo de toda la secuencia, hubiera resuelto el problema. |
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