Alguna vez alguien pens贸 que era una buena idea trabajar en un software libre en el que todos pudieran colaborar, mejorar continuamente y regalar completamente gratis. Pocos lo tomaron en serio. Algunos dijeron que era una mala idea porque no tendr铆a una marca, ni soporte t茅cnico.
Y entre que unos dec铆an s铆 y otros dec铆an no, otros escucharon.
Alguna vez en un extenso pa铆s llamado alguien alz贸 la mano y decidi贸 que s铆, que el llamado software libre era una buena idea porque era efectivo y gratuito. Los a帽os pasaron y las oficinas de gobierno y las escuelas p煤blicas se inundaron de programas de c贸digo abierto.
Y as铆 llegamos al hoy. Brasil es hoy en d铆a uno de los pa铆ses del mundo en los que este movimiento -basado principalmente en el sistema operativo Linux- encuentra una de sus mayores fortalezas.
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El refrigerador reduce su consumo de energ铆a al m铆n铆mo. Son las 12 del d铆a y no hay nadie en casa. Ser谩 hasta las 5 de la tarde, unos minutos antes de que alguien vuelva a cruzar la puerta, que regresar谩 a su temperatura original.
La lavadora, por su parte, comienza un periodo de actividad. Tiene una carga de ropa blanca que atender. Sabe que el precio de la electricidad se redujo para quienes usen la menor energ铆a posible durante la ma帽ana, por lo que se activa en modo ecol贸gico.
Todos los aparatos de la casa desactivan la funci贸n de standby. Ahorrar energ铆a es una prioridad, salvar al planeta lo mismo, pagar menos tambi茅n.
Esto no es ficci贸n. y el a帽o es 2020. Esto es la internet de la energ铆a. Esto es electricidad inteligente.
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La reuni贸n est谩 por comenzar. Los flamantes ejecutivos se encuentran alrededor de la mesa. En un instante todos se llevan las manos a la cintura y desenfundan. El brillante color de sus "armas" queda expuesto sobre la mesa.
Iphone, Blackberry, Android, entre otros. Sus tel茅fonos inteligentes anuncian que su atenci贸n estar谩 dividida entre la junta y sus correos electr贸nicos.
A nadie se le ocurri贸 preguntar, sin embargo, si lo que hac铆an era v谩lido o correcto. Y es que, despu茅s de todo, no tiene nada de malo dejar de poner atenci贸n para enviar un mensaje de texto, 驴o s铆?
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La 辫补蝉颈贸苍 por la tecnolog铆a y la actividad sexual pueden ser amantes o rivales.
Son enemigos cuando compiten. Hace algunos meses una encuesta en Francia encontr贸 que el 39% de los entrevistados pon铆a a la tecnolog铆a a la cabeza de la lista de cosas que les causaban placer, frente a un 36% que prefer铆a las relaciones sexuales.
Los expertos explicaban que los dispositivos tecnol贸gicos dan a quienes mayor autoestima y seguridad. Los gadgets -con precios m谩s accesibles- llegaron para reemplazar los autom贸viles 煤ltimo modelo. Por ello se les daba m谩s importancia que al sexo.
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El ser humano se ha preocupado durante a帽os por la muerte. Se le sabe inevitable, pero a煤n as铆 se le teme.
Ello a pesar de que como dijo David Attenborough, "el hombre termin贸 con la 别惫辞濒耻肠颈贸苍" con ciencia y tecnolog铆a. "No es natural, que alguien de 82 a帽os como yo, est茅 vivo", dijo el presentador de Planeta Tierra de la 成人快手.
Pero m谩s all谩 de echar de menos a los seres queridos, la muerte trae consigo preocupaciones ligadas a la era digital. 驴O es que acaso no se han preguntado que pasar谩 con su vida digital una vez que la real llegue a su fin?
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| 12:27, Mi茅rcoles, 29 Julio 2009
Alguna vez alguien pens贸 que era una buena idea trabajar en un software libre en el que todos pudieran colaborar, mejorar continuamente y regalar completamente gratis. Pocos lo tomaron en serio. Algunos dijeron que era una mala idea porque no tendr铆a una marca, ni soporte t茅cnico.
